Si tienes interés en el mundo de las criptomonedas o ya estás dentro de él, es muy importante mantenerse actualizado sobre los acontecimientos que ocurren en el mundo en estos aspectos.
Para empezar, desde que surgió el Bitcoin, muchos otros acontecimientos han ocurrido en el mundo de la criptomoneda, siendo noticias mundiales muchos de ellos. Últimamente, uno de los acontecimientos de referencia ha sido la explotación masiva de las ICOs.
Las ICOs son, por definición, una recolección de fondos, en la cual quienes aportan lo hacen a manera de inversión, a cambio de tokens. Estos tokens les dan varios privilegios dentro de la organización que promueve la ICO en la que han participado.
Estos privilegios pueden ser de variada naturaleza, por ejemplo: recibir pagos en criptomonedas o dinero convencional, poseer derecho a opinar sobre las decisiones tomadas en la organización, poseer acciones en la organización, entre otros.
A medida que más y más compañías participan y organizan ICOs como una herramienta de recolección de fondos y una mayor cantidad de personas e inversores aportan en estos proyectos, los gobiernos también han apuntado su mirada hacia ellos.
El problema es que la mayoría de estas oportunidades de inversión no están reguladas y usualmente no son diseñadas con garantías para los inversores. Usualmente usan promesas para atrapar su capital e inyectarlo en la solución de algún problema en específico con el poder de la innovadora tecnología Blockchain.
Sin embargo, no siempre el uso de estas promesas funciona. Usualmente los gobiernos y entes reguladores asumen que este tipo de proyectos son muy susceptibles de formar parte de una estafa y son mayoritariamente tomados como situaciones sospechosas.
Ya que la masificación de las ICOs es relativamente reciente, los entes regulatorios aún están formulando y desarrollando sus lineamientos a seguir para lidiar con fenómenos de este tipo. Más aún, muchos países apenas han publicado avisos sobre ellas, mientras que unos pocos han actuado proactivamente, bien sea a su favor o en su contra.
Hoy te explicamos como Suiza sigue desarrollando su regulación sobre los eventos ICO y cuáles son sus objetivos. Siempre es importante saber si los proyectos en los que invertimos cumplen con las normas, para tener mayor
garantía de que no son una estafa y de que no estamos haciendo una inversión con un mayor riesgo del que podemos afrontar.
El 16 de febrero de 2018, la Autoridad Supervisora del Mercado Financiero Suizo publicó una serie de lineamientos que han de ser aplicados a la existente legislación sobre la regulación de ICOs (Initial Coin Offerings por sus siglas en inglés).
Estas regulaciones apuntan a apoyar la entrada de la tecnología Blockchain (sustento de las criptomonedas) al mercado Suizo, ya que las organizaciones que la utilizan no pueden simplemente regirse según las regulaciones previamente existentes. Al mismo tiempo protege a los inversores y la integridad el sistema financiero.
De acuerdo a la mencionada publicación, estos lineamientos se suscitan debido al aumento de la cantidad de ICOs llevadas a cabo en Suiza, además de la falta de claridad respecto a si deberían ser reguladas o no. La transparencia es ideal debido a la gran demanda y la volatilidad del mercado.
Sin embargo, aún no existe en Suiza una legislación completa sobre la regulación de las ICOs. En el futuro, los tokens (o “acciones” obtenidas por los inversores de una ICO) serán considerados dentro de tres categorías: tokens de pago, de utilidades y de acciones.
No hay un acuerdo global sobre las regulaciones respecto a las ICOs. China está en un extremo de la balanza habiendo prohibido todas las ICOs en el 2017, mientras otros países como Singapur y Australia han propuesto lineamientos regulatorios para las ICOs diseñados para apoyarlas, manteniéndolas dentro de los límites de la ley, así como está siendo llevado a cabo en Suiza.
Es interesante notar que la mayoría de los proyectos de regulación de ICOs alrededor del mundo están acompañados de avisos a los inversores de la posibilidad de toparse con una estafa o un fraude al participar en estas nuevas modalidades de recolección de fondos.
Este anuncio de la Autoridad Supervisora del Mercado Financiero Suizo culmina con un aviso sobre los riesgos asociados a la participación en una ICO, principalmente respecto a la volatilidad de los precios del mercado y la posibilidad de la ilegalidad de los contratos hechos mediante la utilización de tecnología Blockchain.
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